Homenaje a Hector Guillomia

Nada mejor que tener presente a Héctor en este lugarcito del estadio de Sportivo, fue aquí, en este lugar, donde Héctor, domingo tras domingo, se instalaba con cambio y talonario en mano para realizar la tarea del cobro de entradas en los partidos de local. Almorzaba tempranito y venía a tomar posesión en ventanilla, por muchos años, era el primero en llegar a este lugar, eso le aseguraba al Club que todos los visitantes, primeros en llegar al campo de deporte  abonen sus entradas como corresponde.  De a poco llegaba otro miembro de la Comisión y/o colaborador  y  le ayudaba en esta tarea, tarea gratificante por cierto porque le permitía relacionarse con toda la gente a fin al futbol de distintas localidades, más los locales que cada domingo participaban y participan de este hermoso deporte como es el futbol. Héctor sabía muy bien la importancia que tenía y tiene la recaudación de las entradas a la cancha,  pues tantos años en la comisión de Sportivo sabía y sabe  muy bien de todo los gastos que representa poner un equipo en el campo de deporte, sabía que muchos de esos gastos se cubrían y cubren con las entradas,  por eso Héctor, era  categórico, muy celoso muy puntilloso de esta tarea, le molestaba sobremanera que algunos pícaros pasaran por debajo del alambrado para zafar de la entrada y lo recordamos corriendo en más de una oportunidad para recuperar esa entrada perdida,  esa misma perseverancia por salvar el interés económico del club hacía que casi no pudiera mirar nunca un tiempo completo de los partidos porque él se quedaba solo, sino lo acompañaban, se quedaba firme hasta el final ,  porque sabía que en cuanto se fuera, los maníacos de siempre,  entrarían sin pagar cuando se levantaban la taquilla.
HECTOR: sabemos que no es esta la única tarea que  desarrollaste en la vida del Club Sportivo, fueron muchas horas de colaboración desinteresada en distintas actividades, pero es aquí,  en este lugar,  donde domingo tras domingo,  durante 30 años te recordamos colaborando con pasión, con humildad, con extrema honestidad, y sobre todo y a tu modo, con mucho AMOR, porque el AMOR que le distes a esta Institución se vio reflejado en tu  incansable colaboración. Héctor sos y serás  un ejemplo a seguir por otros hombres y mujeres que amen del mismo modo a la institución.  En reconocimiento a ese trabajo silencioso y desinteresado es que este lugar merece llevar tu nombre. “HECTOR GUILLOMIA”

Foto: Hector Guillomia entragando copa a Pablo Keil (década del 90)

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